“Tuve muy buenos jefes y compañeros que me permitieron conocer mis fortalezas y debilidades; me impulsaron a seguir trabajando por mi desarrollo; y también contribuyeron a mi desarrollo personal. Estoy muy agradecido de CruzBlanca en todas las etapas que he vivido”.
“Soy una convencida de que cuando uno se preocupa por las personas, manteniendo un buen clima y generando una retroalimentación constante, los resultados llegan solos. Eso lo he sentido yo de parte de la empresa y me ha facilitado mi desarrollo profesional”.
“Soy amante de lo que hago. Lo paso muy bien trabajando y, por lo mismo, pongo todo de mí. Asimismo, para mí las lealtades son muy importantes y funciono desde ese prisma. Esa es una de las razones por las que quiero seguir abriendo puertas y aprovechando las grandes oportunidades que se pueden encontrar acá”.
“En todas las experiencias –buenas y malas-, CruzBlanca siempre ha confiado en mí; me ha entregado afecto, oportunidades y la posibilidad de conocer la tremenda calidad humana que caracteriza a su gente. Por todo esto, llevo a CruzBlanca en el corazón”.
“Que los colaboradores sean felices con lo que hacen es el único camino para entregar el mejor de los servicios. Mi objetivo en mi actual cargo es acompañar a cada uno de los integrantes de mi equipo, velando por su crecimiento, desarrollo y cumplimiento de los objetivos establecidos por la Compañía. Lo importante de CruzBlanca es que aquí crece la empresa y también los que son parte de ella”.
“Me gusta mantener buenas relaciones, disfruto del trabajo y creo que la actitud con que uno lo encare es fundamental. Estoy comprometido y con ganas de seguir trabajando acá por mucho más tiempo. Si uno tiene interés en seguir desarrollándose profesionalmente, la Compañía otorga todas las herramientas y posibilidades para hacerlo; y eso es muy positivo pues también deja en manos del empleado, conforme a su inquietud y aspiraciones de perfeccionamiento, la posibilidad de proyectarse”.
